07 Dic CÓMO TENER DISCIPLINA EN 2 PASOS

La disciplina es la característica principal de las personas que tienen éxito en su vida personal y profesional. En ocasiones podemos nacer con esta capacidad y desarrollar nuestra vida entorno a la disciplina de forma fluida, y en otras es necesario aprender a que forme parte de nuestra vida para impulsar la productividad, alcanzando un rendimiento extraordinario. De esta forma, la disciplina no es más que la capacidad de dirigir tu atención y energía hacia la consecución de tu meta, descartando todo aquello que te aleja de esta y siendo constante en tus acciones. Los motivos que explican la falta de disciplina son los siguientes:

• No tienes un objetivo claro

Puede que te plantees ser feliz, tener un mejor trabajo o ganar más dinero, pero para alcanzar la auténtica felicidad tus metas deben ser claras y específicas. En lugar de pensar en tener un mejor trabajo, reflexiona qué trabajo sería; de qué quieres trabajar –lo que hayas o no estudiado- y dónde quieres desarrollar tu actividad –presencial u online-, de manera que tu trabajo ideal sea mucho más concreto. Lo mismo ocurre con el dinero, pues “ganar mucho dinero” no es una cifra, mientras que ingresar 8.000€ al mes sí es una meta específica.

• La falta de focalización

Aún cuando tenemos un objetivo claro, aparecen muchos factores distractores que pueden desviarnos de la consecución de este –otro proyecto, salir de fiesta o evitar el trabajo- lo cual se traduce en centrar la energía en actividades que no ayudan a alcanzar tu meta. Por ello, tener el foco en las actividades que realmente marcan la diferencia es imprescindible para dirigir tus acciones de forma potenciadora y efectiva, priorizando aquello que es importante para ti y aprendiendo a diferenciar entre ocio y responsabilidad.

• Te dejas condicionar

Tu entorno, ya sean tus amigos, familia o conocidos, ejercen una poderosa influencia sobre ti y tus creencias, de forma que si no eres consciente de ello y te dejas llevar, existe el riesgo de dirigirte por un camino muy diferente al que realmente tú deseas. Muchas veces es la gente que nos quiere la que nos aconseja y trata de guiarnos, pero nadie mejor que tú sabe lo que realmente le conviene, de ahí que tengas que decidir a propia voluntad y ser la persona que controla su destino. Decide qué quieres y actúa.

Una vez conocemos los motivos de la falta de disciplina -lo cual es crucial para desarrollarla-, te muestro los dos pasos clave que te ayudarán a conseguir mayor disciplina e impulsar tus resultados desde hoy mismo:

1. Focalización

Cuanto antes comprendas que conseguir tu meta es cuestión de centrarte en lo importante y mantener la atención en ello te llevará hacia el éxito, mejor te irá. Como dice Daniel Goleman en su obra Focus, la excelencia pasa por dirigir la atención y acciones hacia la consecución de nuestro objetivo libremente definido.

2. Ley de Pareto o Ley del 80/20

En ella, se expone como el 80% de tus resultados provienen del 20% de acciones, lo cual explica que muchos de los esfuerzos que llevamos a cabo son infructíferos hasta que conocemos esta Ley. Reflexiona acerca de qué (pocas) cosas haces bien, cuáles son tus talentos y qué es lo que te da resultado a día de hoy, para a continuación dirigir tus acciones con mayor eficiencia y efectividad.

Ahora que conoces los motivos de la falta de disciplina y los pasos imprescindibles para alcanzarla y disfrutar de una mayor productividad y acercarte a tus metas, llega el momento de pasar a la acción.