21 Mar MOTIVACIÓN PARA TUS METAS

La motivación es el requisito indispensable para la consecución de cualquier meta que desees alcanzar, siendo precisamente ellas las asignaturas pendientes del ser humano: las metas y la motivación para alcanzarlas. Es tan importante contar con una meta y un propósito de vida como el comer, pues establecer objetivos que te motiven nutren en gran medida la sensación de felicidad del ser humano.

Comprometerte con el cumplimiento de tu meta (si no tienes una, es el momento perfecto para establecerla) es el paso principal para que la motivación tenga efecto duradero y te acerques cada día a su consecución, sea cuidar de tu salud, poner en marcha tu negocio o mejorar tu situación personal; áreas que abordamos en Escuela de Capacidades. De esta manera, el paso principal es contar con la meta que despierte tu motivación, para posteriormente mantenerla despierta de la siguiente manera:

1. Forma parte de tu esencia

Para abordar tu meta -personal o profesional- con éxito, es requisito imprescindible que te resulte realmente inspiradora. Ha de ser elegida por ti, no impuesta por otros, favoreciendo la sensación de bienestar y motivación en lo más profundo de tu corazón, puesto que forma parte de quién eres realmente, de tu visión del mundo y aquello para lo que has nacido.

2. Mejora el mundo

Como eres una persona única, con todos tus talentos y habilidades, has nacido para aportar valor único al mundo. Cuando vives acorde a tu esencia, acorde a tus deseos y quién eres realmente, la motivación permanece de manera firme para guiarte hacia la consecución de tus metas.

3. Te hace progresar

Es inevitable. Cuando te sumerges en un estilo de vida comprometido con tu esencia y disfrutas del proceso, el progreso se presenta en tu vida en forma de mayor sensación de felicidad, lo cual abarca mejorar tus ingresos a la par que disfrutas de mayor sensación de plenitud en cada área que compone tu vida, como las relaciones, la mejora personal y el cuidado de tu salud.

Como ves, la motivación es un proceso que requiere de compromiso y amor propio, el cual una vez adquirido fluye a cada área que compone tu existencia, siendo dotada de sentido de cara a la consecución de tus metas. Eres tú la persona que decide dar el paso y vivir la vida que deseas, pues somos los únicos responsables de la situación que estamos viviendo. En la vida, muchos prefieren ser espectadores y no arriesgarse, mientras otros se atreven a abrazar el camino de disfrutar de una vida plena. Tú decides en qué lado estás; a mí considérame la persona que te acompaña hacia la plenitud.